Encontrando un propósito en la vida

“Mi fortaleza y mi cántico es JAH, Y él me ha sido por salvación. Voz de júbilo y de salvación hay en las tiendas de los justos; La diestra de Jehová hace proezas. La diestra de Jehová es sublime; La diestra de Jehová hace valentías. No moriré, sino que viviré, Y contaré las obras de JAH”. Salmos 118:14-17

En mayo de 2019, la Revista de la Asociación Médica informó sobre un estudio realizado desde 1992. A partir de ese año, y cada año desde entonces, el estudio de salud y jubilación entrevista a adultos en edad avanzada o próximos a ella. Al seguir a estas personas de un año a otro y al agregar nuevos participantes al estudio a lo largo del tiempo, pueden rastrear los factores que tienen el mayor impacto en la vida y la salud de miles de personas. Resumieron su hallazgo clave de esta manera: "Un creciente cuerpo de literatura sugiere que tener un fuerte sentido de propósito en la vida conduce a mejoras tanto en la salud física como mental y mejora la calidad de vida en general".

Lo que es cierto en la vejez es cierto durante toda la vida, quienes tienen un propósito y una meta definida en la vida tienden a llevar una vida más feliz y saludable que quienes no lo tienen. Cada hijo de Dios tiene dones diferentes y hay muchas avenidas a través de las cuales le servimos. Pero hay una cosa que todo cristiano vivo puede hacer: alabar a Dios. “A Jehová cantaré en mi vida; A mi Dios cantaré salmos mientras viva” (Salmos 104: 33).

Cuando reconocemos la importancia de traer gloria a Dios, entendemos que siempre tenemos un propósito importante en nuestra vida. Siempre podemos alabar a Dios. ¿Y quién debería alabarle más que los que han sido redimidos por Cristo? En el sentido realista de la palabra, Jesús es nuestra salvación.

Principio del evangelio para ser edificado: Alabe a Dios hoy por su gracia y el regalo de su salvación.

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