Excelencia en la construcción
Salomón construyó el Templo con muchas detalles para el Señor; él también levantó otras construcciones buscando que fueran excelentes. En este capitulo 7 de Reyes hizo su propia casa. Cada detalle fue pensado no solo para su propio beneficio, sino que fueron planeados para que otros también pudieran disfrutar de la excelencia. Cada espacio fue planeado, lo que nos muestra que Salomón estaba buscando que todo fuera excelente para Dios y para el servicio de Él. Un principio único, cada cosa que hacemos debe ser buscando la excelencia.
Cada persona participando en las construcciones que él levantó usó la cooperación de otras personas, es decir que puso los talentos de otros en acción para que todo fuera con excelencia. Un ministerio donde usamos nuestros talentos es uno que busca la excelencia.
La preparación por cada una de sus obras es esencial, los planes y preparación van de la mano. Salomón reconocía que necesitaba preparar antes de comenzar, anticipando excelencia en la construcción. En el servicio de Dios necesitamos orden y preparación, para obtener excelencia.
En la lectura…¿le sorprenden los materiales que usaron? ¿Los detalles le maravillan? ¿Las piedras preciosas y el oro le hacen pensar que tan caro era? ¿Cada uno usando sus talentos le hace pensar en que tanto conocimiento tenían? ¿Cree que eran construcciones bellas? ¿Puede imaginar la construcción terminada?
La belleza de las construcciones de Salomón y dedicadas a Dios nos muestra la santidad y majestad de Dios. Aunque era algo físico, realmente eran construcciones que buscaban excelencia delante de Dios, lo que podemos aplicarlo como una referencia a nuestro propio templo, nuestro cuerpo. ¿Somos saludables? ¿Cuidamos lo suficiente? ¿El Espíritu Santo estará feliz en nuestro corazón? ¿Hay un espacio bonito y agradable donde more nuestro Dios en nuestras vidas? ¿Hay pureza? ¿Nuestro templo tiene excelencia? ¿Quiere mostrar excelencia?
Realmente las construcciones de Salomón eran hermosas, pero porque usó todo lo mejor para construirlas. Usó cada talento de cada persona que conocía buscando que fueran excelentes para el Señor. Así debemos hacer con nuestro cuerpo—planear que su propio templo traiga excelencia para Dios, usar sus talentos para mostrar excelencia y sobre todo hacer de su cuerpo un lugar tan excelente que sabe que el Espíritu Santo está bien dentro de usted…cuidarlo, comer las cosas saludables, tomar vitaminas siempre que puede, hacer ejercicio, descansar bien, dar sonrisas grandes y bonitas, buscar la pureza y dar todo su mejor para dar excelencia al Señor.
Este día haga de su templo el lugar más bonito, como si fuera la casa de Salomón o el Templo que él levantó, que cada detalle en su vida revele que sus ojos están en lo eternal; invierta en su relación con Dios, que su rostro hoy hermosee las Palabras de Dios; ore como si estuviera cara a cara con el Señor; coma las cosas saludables, beba mucha agua y haga que la construcción de su templo para Dios sea un lugar de excelencia.
Leer: 1 Reyes 7 y 2 Crónicas 4; Proverbios 12
¿Por qué no se pudo saber el peso del bronce?