Llenando la casa de Dios
“Cuando sonaban, pues, las trompetas, y cantaban todos a una, para alabar y dar gracias a Jehová, y a medida que alzaban la voz con trompetas y címbalos y otros instrumentos de música, y alababan a Jehová, diciendo: Porque él es bueno, porque su misericordia es para siempre; entonces la casa se llenó de una nube, la casa de Jehová. Y no podían los sacerdotes estar allí para ministrar, por causa de la nube; porque la gloria de Jehová había llenado la casa de Dios.”
2 Crónicas 5:13-14
¡Usted es una casa! Una donde mora el Espíritu Santo. ¿Está lista su casa para adorar?
La Biblia nos dice que nosotros somos la iglesia, cada uno de nosotros, los que tenemos a Cristo, somos una casita donde Cristo está… ¿Su casa está lista? ¿Su casa esta espiritualmente ordenada?
Salomón buscó orden antes de traer el Arca del Pacto, él buscó que todo estuviera bien antes de traer la presencia de Dios. El lugar estaba preparado, el arca del pacto fue puesta en su sitio y los músicos estaban listos para comenzar…¿Está preparando su vida para la presencia de Dios? ¿Está listo para tener casa llena?
Las cosas que van juntas:
su relación personal con Dios
su tiempo con Dios
su templo donde está Dios
Aunque piensa que no importan, lo cierto es que sí importan. Si su relación con Dios no está bien hoy, sus otras relaciones no van a funcionar bien. Si su relación con Dios no está bien hoy, lo que quiere hacer en la obra del Señor no va a funcionar bien. Si su tiempo con Dios es cinco minutos al día o ningún minuto al día, no espere que su casa (usted) está lista para andar con Él. Si no ora, si no lee su Biblia ¿qué le hace pensar que tiene el favor de Dios? Si su casa (corazón) está sucia, hay basura por todos lados, hay cosas bajo la cama, tiene desorden y lo oculta con “buena apariencia” ¿qué le hace pensar que usted es una bendición? ¿Por qué piensa que está listo para adorar con sus otros hermanos? La presencia de Dios puede y debe morar en nuestras casas (corazones) de forma que no hay espacio para las cosas malas.
Salomón construyó algo físico, un lugar; pero hoy, construya su propio lugar donde la presencia de Dios esté tranquilamente. Si cada cristiano iba hacer eso hoy, la presencia de Dios no solamente brillaría por medio de su vida, pero también llenaría nuestra iglesia dando el poder de usarnos aún más.
Este día trabaje duro quitando, limpiando y ordenando su casa, porque el domingo debemos sentirnos como Salomón, teniendo la casa llena de la gloria de Dios.
Leer: 1 Reyes 7; 2 Crónicas 4 y Proverbios 13
¿Por qué Salomón mandó a llamar a Hiram?